Hay muchos trucos muy útiles para aprovechar mejor tu hervidor de agua. No importa en qué época del año nos encontremos o qué temperatura haya en el exterior. Un hervidor de agua te puede sacar de más de un apuro, no sólo culinario, sino también de limpieza. De ahí que sea sumamente complicado ubicar esta entrada en el apartado de «Cocina» o en el de «A limpiar«… en cualquier caso esperamos que la información que encontréis en ella os resulte, como mínimo, curiosa.
Por supuesto, el uso que la mayoría le damos al hervidor de agua es, claro, para hervir agua. Y luego la vertemos en una tetera o directamente en la taza con nuestra bolsita de infusiones, esperamos a que se enfríe… Antes o después añadimos limón, miel, azúcar o ninguna de estas opciones… y al final, u olvidamos que hemos preparado un té y lo encontramos horas después congelado -pasa más de lo que cualquiera está dispuesto a admitir- o lo vamos tomando a la temperatura que más nos gusta.
Elegir entre todos los modelos de hervidores que hay en el mercado no es demasiado complicado. Lo difícil es sacarle partido en todas sus facetas.
¿Sabías que tu hervidor de agua puede ser un excelente pinche de cocina?
Naturalmente no troceará verduras ni vigilará los guisos, pero puede facilitarte muchísimo la labor de cocinar.
- Este truco es bastante conocido, pero por si acaso, lo añadimos: hierve el agua y ahorra tiempo y energía en la preparación de pastas, arroces, sopas… y cualquier guiso que lo requiera. Si echas el agua ya hirviendo, tus recetas estarán listas mucho antes.
- Y ahora vamos a dar un paso más: cuece la pasta dentro del hervidor de agua. En serio. Muchos estudiantes verán el cielo abierto con esta sugerencia -luego hay que limpiar bien el recipiente, ¿eh? de eso no nos libramos-. Algunas marcas de hervidores de agua como Philips están preparadas para ello. Para acelerar la cocción de pasta sólo hay que dejar que el agua hierva hasta los cien grados, poner a pasta dentro y dejar que se mantenga a esa temperatura durante al menos ocho o nueve minutos. El resto del proceso es el de siempre, pasar por un colador, echarle agua fría y condimentar al gusto.
- Lo mismo vale para hacer huevos hervidos: es tan fácil como meter los huevos en el hervidor, cubrirlos de agua, y dejar que se cuezan durante cuatro minutos. Una vez cumplido el tiempo, apaga el hervidor de agua y deja reposar durante seis minutos. Quienes han probado este truco nos cuentan que es mejor si se utiliza una redecilla, tipo bolsa de tomates, para «pescar» los huevos con mayor facilidad.
- Cuscús: normalmente ponemos el cuscús en un cazo con aceite, lo doramos y añadimos el agua… Pero si tenemos algo de prisa, podemos poner a hervir el agua correspondiente y luego echarla sobre el grano, para que se rehidrate. A partir de ahí se añaden los ingredientes que se desee. El cuscús es ideal para una fresca ensalada, pero también como base de una bolognesa o como acompañamiento. Por cierto, ¿se os ha ocurrido alguna vez servirlo dentro de pimientos asados?
- Porridge: pon avena en un cuento y, en el hervidor de agua hierve agua, leche, o una mezcla de ambas. Cuando la cocción acabe, añade el líquido a los copos de avena y condimenta con frutos secos, miel…. También puedes combinarlo con un huevo poco cocido y algo de queso parmesano rayado.
Una ayuda para limpiar
En este caso tu hervidor de agua no se va a convertir en una máquina más de limpieza, pero tener el agua hervida en poco tiempo puede serte de mucha utilidad para:
- Limpiar los platos: pon un poco de agua en el fregadero, añade jabón y vuelca con cuidado el agua hirviendo. ¡No hará falta usar el agua caliente del grifo y ahorrarás tiempo y energía!
- Para limpiar suelos «difíciles» nada mejor que el agua caliente. Coge el cubo y llénalo de agua previamente hervida y mézclala con un poco de agua fresca. La suciedad, especialmente la grasa, saldrán con mucha más facilidad.
- Y por supuesto y con mascarillas obligatorias para circular casi por todo, el agua hirviendo es la manera más rápida de asegurarse de que ningún virus sobrevive en la tela. Simplemente coloca la mascarilla en un cuenco, utiliza tu hervidor de agua y vuelca el líquido bien caliente sobre la tela. Una mascarilla de este tipo aguanta unos diez lavados.
Hervidores de agua: los más vendidos
Normalmente no son una prioridad pero hay personas que no pueden vivir sin ellos. Si aún no te has decidido a incorporar un hervidor de agua a tu vida, te aconsejamos echar un vistazo a los diversos tipos que puedes encontrar.
- Cecotec Thermosense 120, hervidor de agua eléctrico
- Russel Hobs Retro, hervidor de agua eléctrico de 1,7 litros
- Philips HD9350 hervidor de acero inoxidable
¿Se te ocurre algún otro truco para sacarle más partido a tu hervidor de agua? No dudes en compartirlo con nosotros.
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